Sin sorpresas de última hora

Terminó el plazo de fichajes y, como parecía entreverse, no hubo ese gran traspaso que todos los cronistas y rumorólogos venian anunciando durante semanas.

Ni Kidd, ni Allen, ni Carter, ni Garnett, ni Gasol, ni Lewis. Un sólo traspaso en tiempo límite, el que mandó a Juan Dixon a Toronto y a Fred Jones a Portland.

Para los que son nuevos y esto les pueda sorprender diré que todos los años es exactamente lo mismo cuando llegan estas fechas (ya lo comenté en mi anterior entrada), comienzan a salir posibles traspasos de debajo de las piedras y de donde no había habido nada anteriormente. Otra cosa son los casos como el de Gasol, que el jugador pide ser traspasado y se sabe públicamente que varios equipos han preguntado por él y que su equipo estaría dispuesto a deshacerse de sus servicios por un precio módico.

Si es cierto que algunos años se han consumado traspasos de gran calibre en las últimas horas del plazo, pero no es nada habitual. Veremos si en años próximos cambia esta tendencia y los equipos deciden intentar arreglar con traspasos lo que no han conseguido con juego.